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El Valle de Rieti en Sabina es conocido como Valle Santa por el número de monasterios franciscanos que salpican esta región boscosa al noreste de Roma. Hay varias leyendas relacionadas con el santo, una de las cuales podría haber dejado huellas que aún hoy son visibles.
En los bosques de la pequeña ciudad de Rivodutri, a lo largo del Camino de San Francisco, se dice que una haya extraordinaria ha tomado su forma actual al albergar al santo durante una tormenta. Esta leyenda explica por qué, a diferencia de otras hayas, este árbol monumental en particular ha asumido su actual forma “llorosa”.
Aunque es más probable que el árbol sólo tenga 250 años de edad -y por lo tanto demasiado joven para haber protegido al santo en esta circunstancia-, es una rara y extraordinaria haya con ramas nudosas y retorcidas que le dan una forma de cuento de hadas. Los peregrinos que recorren el Camino de San Francisco dejan ofrendas en la base del árbol y se maravillan por su extraordinaria forma y tamaño.
El árbol tiene aproximadamente 26 pies (ocho metros) de altura y su circunferencia mide aproximadamente 13 pies (cuatro metros).
