Dónde se filmó Wake Up Dead Man: Un misterio de Knives Out

La magia del cine no solo se encuentra en las historias que cuenta, sino también en los lugares donde se desarrollan. En el caso de "Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery", la narrativa gira en torno a un pequeño pueblo ficticio que evoca un sentido de misterio y encanto. Con un detective carismático liderando la trama, esta película nos sumerge en un mundo donde cada rincón cuenta una historia. Acompáñanos a descubrir los fascinantes escenarios que dieron vida a este thriller.

El pueblo ficticio de Chimney Rock y su inspiración real

El escenario central de la película es el pequeño pueblo de Chimney Rock, un lugar que parece sacado de un cuento. Para crear esta localidad ficticia, el equipo de producción comenzó su búsqueda en Google Maps, buscando un entorno que reflejara historia y autenticidad. El diseñador de producción, Rick Heinrichs, comenta que buscaban un valle fluvial con un aire de asentamiento histórico. Finalmente, se decidieron por Cold Spring, un encantador pueblo a poco más de una hora de Nueva York, que sirvió tanto como inspiración como locación para algunas tomas de transición.

Cold Spring no solo se utilizó como referencia para Chimney Rock; algunas escenas de este pintoresco pueblo fueron filmadas allí. Para lograr esto, el equipo combinó tomas filmadas en el estudio con imágenes de la calle principal de Cold Spring, donde se insertaron elementos ficticios como el famoso Chimney Rock y el bar Il Diavolo mediante efectos visuales.

Nuestra Señora de la Perpetua Fortitud

La iglesia “Nuestra Señora de la Perpetua Fortitud” juega un papel crucial en la narrativa de la película. Con su impresionante arquitectura neogótica y vitrales bellamente elaborados, se ha convertido en un símbolo de la dualidad del bien y el mal en la comunidad. La búsqueda del equipo de producción por una iglesia adecuada los llevó a Holy Innocents, una iglesia del siglo XIX ubicada cerca de Londres. Aunque su interior era algo monótono, lograron replicar un espacio más grandioso en el set.

El cinematógrafo Steve Yedlin y el equipo trabajaron para asegurar que la armonía entre el exterior y el interior fuera perfecta. Incorporaron elementos de la arquitectura gótica para dar vida a la iglesia y alinearlos con los temas de la película. Además, el púlpito desde donde predica el Monsignor Wicks es un elemento que evoca tanto la devoción como la intimidación, simbolizando las luchas internas de los personajes.

La casa de Vera Draven

Vera Draven, interpretada por Kerry Washington, es una abogada perspicaz que vive en una lujosa mansión, un reflejo del status de su personaje en la comunidad de Chimney Rock. La producción tuvo que encontrar una residencia que encajara con la esencia americana y la estética de la región. Finalmente, se decidió por una elegante propiedad en Guildford, un pueblo de Surrey, que también contaba con una estructura renovada que había sido un antiguo court de squash, utilizada para filmar las escenas interiores y exteriores de la casa de Vera.

El mausoleo y la cabaña del cuidador

En un guiño a las obras de Agatha Christie, el mausoleo de los Wicks se convierte en un elemento clave en la trama. Este mausoleo, ubicado en los terrenos de la iglesia, es un lugar de misterio e intriga, con un diseño que se inspiró en tumbas de Detroit, añadiendo un toque egipcio que era común en la época. La cabaña del cuidador, al igual que el mausoleo, fue construida en el sitio de filmación, en el bosque de Winterfold, creando una atmósfera que complementa perfectamente la narrativa de suspenso.

Il Diavolo: El bar local lleno de intriga

Il Diavolo, un bar local que parece sacado de un sueño, es otro de los escenarios clave en la película. Aunque no es un verdadero bar que se pueda visitar, se construyó en el escenario de Warner Bros. en Londres, inspirado en los típicos pubs retro americanos. La decoración del bar está llena de elementos icónicos del diablo, lo que lo convierte en un lugar de encuentro intrigante para los personajes, especialmente cuando el detective Blanc hace su aparición. Detalles como una lámpara de Elvis y una pintura paródica de Van Gogh añaden un toque de humor y extravagancia al ambiente.

La conexión del paisaje con la narrativa

La cinematografía de "Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery" es esencial para la atmósfera de la historia. Con paisajes que van desde los bosques exuberantes hasta las calles acogedoras de Cold Spring, el entorno natural no solo complementa la narrativa, sino que también actúa como un personaje en sí mismo. Los contrastes entre el entorno pastoral y los oscuros secretos de los personajes crean una tensión palpable que mantiene a los espectadores al borde de sus asientos.

Temas recurrentes y simbolismo en la película

A lo largo de la película, se exploran temas como la ambición, la traición y la redención. Cada uno de los escenarios, desde la iglesia hasta el bar, refleja estos temas de manera sutil pero efectiva. La elección de locaciones no es solo un capricho estético; cada lugar está cargado de simbolismo que enriquece la narrativa y profundiza la experiencia del espectador.

• La iglesia: representa la lucha entre la fe y la corrupción.
• El bar: es un refugio para los secretos y las intrigas.
• El mausoleo: simboliza la muerte y los secretos enterrados.

Con todos estos elementos, "Wake Up Dead Man: A Knives Out Mystery" no solo es una película de misterio; es un viaje visual que invita a los espectadores a explorar no solo la trama, sino también la rica paleta de escenarios que la sustentan. La atención al detalle en la elección de locaciones y la construcción de sets crea un mundo inmersivo que captura la esencia de la narrativa de una manera que solo el cine puede lograr.