Diez platos belgas clásicos que debes probar en tu aventura en Flandes

Cuando se trata de disfrutar la gastronomía en Europa, muchos viajeros gastronómicos suelen pensar en países como Francia o Italia. Sin embargo, Bélgica tiene una rica tradición culinaria que merece una atención especial. Este pequeño país no solo se destaca por su famosa cerveza y chocolate, sino que también ofrece una variedad de platos locales que sorprenden por su sabor y singularidad. Si planeas una aventura en esta encantadora nación, aquí hay diez platos clásicos que no puedes dejar de probar.

Los sabores icónicos de Bélgica

Bélgica es conocida por su diversidad culinaria, que combina influencias de varias regiones. Los ingredientes frescos y de calidad son fundamentales en la cocina belga, y muchos platos tienen raíces que se remontan a siglos atrás. Cada comida cuenta una historia, y cada bocado es una celebración de la cultura local.

La gastronomía belga ha evolucionado a lo largo del tiempo, incorporando tradiciones de las comunidades francófonas y flamencas. Aquí te presentamos una selección de platos que abarcan tanto lo clásico como lo menos conocido, asegurando que tu experiencia culinaria sea completa.

Frites: las auténticas papas fritas belgas

Comenzamos con uno de los platos más emblemáticos de Bélgica: las frites, conocidas en español como papas fritas. A menudo se les confunde con las "french fries", pero su origen es completamente belga. Se preparan con papas frescas, que se fríen dos veces para conseguir una textura crujiente por fuera y suave por dentro.

  • Salsas Variadas: Acompañadas de mayonesa, salsa de cacahuate o una mezcla de especias, las opciones para disfrutar de las frites son infinitas.
  • Comida Callejera: Se pueden encontrar en puestos callejeros de todo el país, especialmente en Bruselas y Brujas.

Moules-frites: mejillones y papas fritas

El plato de moules-frites combina los sabrosos mejillones con las famosas papas fritas. Este plato sencillo se ha convertido en un símbolo de la cocina belga. Los mejillones se cocinan en una variedad de salsas, desde vino blanco hasta crema.

Este plato es particularmente popular en la temporada de mejillones, que va de septiembre a abril. La frescura de los mejillones, junto con las crujientes fritas, lo convierte en una experiencia deliciosa.

Gaufre: el famoso waffle belga

Los gaufres o waffles belgas son un manjar que ha conquistado paladares en todo el mundo. Este postre se caracteriza por su textura ligera y crujiente, y puede servirse con una variedad de coberturas, como frutas, crema batida y chocolate caliente.

  • Variedades: Existen dos tipos principales: el waffle de Bruselas, más ligero y crujiente, y el waffle de Lieja, más denso y dulce.
  • Un placer callejero: Se venden en puestos en las calles y son ideales para un snack mientras exploras las ciudades.

Waterzooi: un guiso reconfortante

El waterzooi es un guiso tradicional que se originó en Gante. Básicamente, se trata de un estofado cremoso que puede prepararse con pollo o pescado, acompañado de verduras frescas. Su sabor suave y reconfortante lo convierte en una opción ideal para los días fríos.

Este plato se sirve típicamente con pan fresco, perfecto para mojar en la rica salsa.

Croquettes de camarones: un bocado irresistible

Las croquettes de camarones son un clásico que no te puedes perder. Hechas con camarones grises de la región, estas croquetas son crujientes por fuera y cremosas por dentro. Se suelen servir como aperitivo y son populares en bares y restaurantes.

  • Tradición Costera: Este plato refleja la rica tradición pesquera de Bélgica, especialmente en la costa del Mar del Norte.
  • Maridaje Perfecto: Se pueden disfrutar con una cerveza local para una experiencia auténtica.

Tomates con camarones: frescura y sabor

Este plato típico, conocido como tomates aux crevettes grises, combina tomates frescos rellenos de una mezcla de camarones grises y mayonesa. Es un bocado que resalta el sabor del mar y la frescura de los ingredientes. Se suele servir como entrante o en ocasiones especiales.

Cannibale: un plato para los aventureros

El cannibale es un plato menos conocido, pero que vale la pena probar. Consiste en carne cruda, generalmente de res, servida con cebolla y especias. Este plato es un favorito entre los amantes de la carne y se puede encontrar en algunos de los mejores restaurantes del país.

Sirop de Liège: el dulce tradicional

El sirop de Liège es un jarabe dulce que se elabora a partir de las frutas típicas de la región, como peras y manzanas. Se utiliza como acompañamiento para panes, quesos o incluso como ingrediente en diversos postres. Es un sabor único que captura la esencia de la fruta belga.

Anguilles au vert: anguilas en salsa verde

La anguilles au vert es un plato que muestra la diversidad de la cocina belga. Consiste en anguilas cocinadas en una salsa verde hecha con hierbas frescas. Este plato es un homenaje a la tradición pesquera de Bélgica y suele servirse en ocasiones especiales.

Carbonnades flamandes: un estofado de cerveza

Por último, pero no menos importante, las carbonnades flamandes son un delicioso estofado de carne de res cocinado en cerveza. Este plato representa la esencia de la cocina belga, mostrando la combinación de sabores y la rica tradición cervecera del país. Se sirve típicamente con papas fritas y es una opción perfecta para una comida reconfortante.

Consejos para disfrutar de la gastronomía belga

Para aquellos que deseen sumergirse en la experiencia culinaria belga, aquí hay algunos consejos útiles:

  • Visita los Mercados Locales: Explorar los mercados de alimentos puede ofrecerte una variedad de platos frescos y productos locales.
  • Prueba las Cervezas Locales: No olvides maridar tus comidas con las cervezas artesanales belgas, que son reconocidas mundialmente.
  • Haz un Tour Gastronómico: Participar en un tour gastronómico te permitirá degustar una variedad de platos en un corto período de tiempo.

Así que la próxima vez que pienses en una escapada gastronómica, no subestimes lo que Bélgica tiene para ofrecer. Con sus platos únicos y sabores inolvidables, este país se convertirá rápidamente en un destino ineludible para los amantes de la buena comida.

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